Set en blanco

6 DEPORTIVO PALENCIA

Carmona

Abel

Levas

Charly (A)

Héctor

Pelayo

Chuchi

(78’ Arranz)

Bayón

(67’ Rabadán)

Moré

Torres

Rodri

(56’ Alonso)

0 MIRANDÉS B

Sergio

Asier

Carri (A)

Dani

Andrés

Unai

Álvaro

Míkel

Blas

(60’ Samu)

Ayuso

(60’ Álex)

Éric

(74’ Diego)

arbitro

Pérez Fernández, zamorano. Asistido por Vicente Ferreiro y Llorente Melendo.

goles

1-0, minuto 44: Centro medido de Charly que remata de cabeza Torres de forma espectacular. 2-0, minuto 50: Centro libre de marca de Moré, Chuchi se lleva el balón dividido y marca de duro disparo. 3-0, minuto 56: Nuevo centro con comodidad de Moré, pasado al segundo palo, marcando sin apenas ángulo Torres. 4-0, minuto 63: Asier Alonso, libre de marca, de tiro colocado al palo opuesto dentro del área. 5-0, minuto 85: Despeje poco afortunado de la defensa, Torres se queda delante del portero, le sortea y marca de cabeza. 6-0, minuto 87: Pase interior de Rabadán que aprovecha Asier Alonso.

público

Balastera. Terreno de juego en malas condiciones.

Por primera vez en lo que va de temporada, el Deportivo Palencia sumó cuatro triunfos consecutivos, además ahora que afronta un calendario complicado. Se mantiene tercero, porque ganó  en el descuento y de penalti la Segoviana, pero mantiene los nueve puntos de margen sobre el quinto clasificado. Ayer, los morados goleaban a un Mirandés B suicida, que con su particular sistema de juego facilitó que los jugadores ofensivos morados se pusieran las botas, especialmente un Diego Torres que vuelve a tener el nivel de la pasada temporada. De nuevo, el marco a cero, evidenciando la solidez defensiva de la que está haciendo gala el cuadro palentino.

Sedano dispuso un 4-2-3-1, con Charly y  Levas en los laterales; Abel y Héctor, en los centrales; Bayón y Pelayo, en los pivotes, con Chuchi en la media punta; Moré y Rodri en los costados, con Torres en punta.

Sara Muniosguren

El Mirandés B, fiel a sus planteamientos, el mismo de Terrazas en el primer equipo, formó con un dibujo poco habitual, con tres defensas, tres pivotes por delante, otro trío de medias puntas, en el que se encontraba el palentino Míkel por el centro y una referencia. Un atípico 3-3-3-1 que buscaba acumular mucha gente por  el centro, cediendo las bandas, con el fin de efectuar una fuerte presión y ganar las segundas jugadas. Como todos los dibujos tácticos, tiene también sus contraindicaciones, dando opción al rival a muchos uno contra uno en banda y por allí llegaba el peligro para los visitantes, que eso sí lograban en el primer tiempo tomar el centro del campo y evitaban la circulación fluida de los morados, ya de por sí complicada por el mal estado del terreno de juego, convertido en un patatal en la zona más próxima a la Tribuna.

La primera aproximación local llegaba a los trece minutos, en una gran parada a bocajarro del portero burgalés a disparo de Bayón. Sin embargo eran los visitantes los que se acercaban con más peligro, como ocurrió con el lanzamiento al larguero de Éric tras un saque de esquina directo y especialmente la de Blas, que tras una pérdida de balón en área propia se quedó delante de Carmona, pero dando tiempo a Bayón a salvar una situación que tenía todos los pronunciamientos para acabar en gol.

Sin embargo, parecía cuestión de tiempo que ese planteamiento mirandés, tan valiente como arriesgado, pasase factura. Y así llegó el primer tanto local. Charly tomó la autopista de su carril, puso un buen balón a Torres para que el máximo artillero morado marcase de espléndido remate de cabeza. Gol psicológico al llegar al final del primer acto.

Al poco del inicio del segundo tiempo llegaban en cinco minutos dos nuevos goles locales. De nuevo, con centro por la banda derecha de Moré sin oposición y definición de Chuchi y Torres, respectivamente. Ceder una banda a jugadores como Moré, con un guante en su pierna, es un suicidio. Ni era el campo, por sus dimensiones,  ni el rival (plagado de jugadores de calidad, con definición y buenos centradores) para jugar de esa forma, por mucho que sea su seña de identidad, más bien la del primer equipo.

Acabó el partido en ese momento, si es que no lo estaba ya antes, aunque todavía diese tiempo a que Torres completase su primer hat-trick de la temporada y a que el Mirandés B, totalmente entregado, comprobase que no hay peor madera que la del propio cuño, al anotar dos goles su ex jugador Asier Alonso.

La plantilla del Deportivo Palencia está demostrando una profesionalidad fuera de toda duda. Con una plantilla muy corta, de sólo 18 jugadores, sumando tres meses sin cobrar y con una evidente crisis institucional, están dando todo un ejemplo. Tanto estos futbolistas como su cuadro técnico, al igual que el proyecto del club morado y su afición, se merecen una solución inmediata. El  27 de este mes, un día antes de recibir al líder, el Zamora, se celebra una Asamblea Extraordinaria. De una u otra forma, ese es el día en el que todo debe arreglarse.

Parco en palabras, como siempre, Santi Sedano valoraba muy positivamente el triunfo de su equipo. «Si ganar al Mirandés B no es fácil, menos meterle seis goles».

Su particular forma de juego, jugando con tres defensas y dejando las bandas libres, supo aprovecharlo perfectamente el cuadro palentino. «Ellos siempre juegan así, como el primer equipo, acumulan mucha gente por dentro, buscan superioridad en esa zona. Cuando ganan las caídas, como tienen gente importante arriba, es un rival complicado. Nosotros hemos tenido pólvora arriba y seguridad defensiva. En el primer tiempo les dimos alguna opción, pero con nuestro segundo gol ya fue más fácil. Es le primera vez que logramos cuatro victorias consecutivas, pero espero que nuestro mejor momento esté por llegar.   No es fácil trabajar en nuestra situación, pero el comportamiento de los jugadores es espectacular».

Fuente: http://www.diariopalentino.es/noticia/ZCD94E451-C948-5C11-80B52ED71C4B347C/20160215/set/blanco