lunes, 29 de febrero de 2016

Golpe de realidad en Palencia

El Zamora Club de Fútbol fue inferior a un Palencia mucho más trabajado y que actuó con mucha más intensidad durante los noventa minutos. Los palentinos ganaban por 2-0 con goles de Moré y Torres y pudieron conseguir una victoria mucho más amplia. El Zamora no encontró su identidad prácticamente en ningún tramo del encuentro. Vílchez acabó expulsado.
 
Ensayo general que terminó en fracaso. El Zamora Club de Fútbol viajaba a la Nueva Balastera de Palencia con la opción de dejar encarrilada la primera posición y sobre todo con la posibilidad de transmitir buenas sensaciones de cara a una hipotética fase de ascenso. No obstante, el Palencia posee una de las mejores plantillas del campeonato y resulta una piedra de toque perfecta con respecto a lo que se puede encontrar el Zamora en las eliminatorias por el ascenso. Pero los rojiblancos estuvieron inoperantes durante casi todo el encuentro ante un Palencia mucho más intenso, trabajado, aguerrido e incisivo. 

Es verdad que el Zamora salió sin complejos al terreno de juego, con ganas de presionar arriba y de sorprender al Palencia. Josema tuvo la primera para los rojiblancos en un cabezazo blando que se fue a las manos del arquero. Pero esa salida fulgurante solo duró cinco minutos. El tiempo que tardó el Palencia en aprovechar un agujero en la zaga de Balta. Una pared vertiginosa entre Chuchi y Moré acabó con el extremo palentino batiendo a Miguel en el mano a mano. Ese gol dejó ver todas las carencias del Zamora y a la vez explotar las virtudes de un conjunto morado que tuvo dos acciones posteriores para haber marcado el segundo.

Tras varios minutos de desconcierto, el partido volvió a igualarse, pero era el Palencia el equipo que imprimía más carácter al duelo. No era un choque para hacer fútbol de toque, sino para fajarse, y ahí estuvo mejor el Palencia. La experiencia primó sobre el césped. Llegaba el descanso con ese 1-0 con un Zamora incapaz de trenzar jugadas arriba, inédito de cara a la portería de Carmona y muy nervioso en el trabajo defensivo.

El inicio de segunda parte parecía alentador para los zamoranos. El equipo de Balta comenzó dominando el balón y con acercamientos a la meta local, pero la realidad es que ninguno de esos acercamientos finalizaba en ocasiones claras. Remates de cabeza forzados, disparos lejanos y poco más para un Zamora que estaba obligado a marcharse arriba en busca del empate. Esa obligación de avanzar líneas la aprovechó el Palencia para tirar contras letales. Con Xavi Moré en un estado de forma brutal, solo la actuación superlativa de Miguel evitó que Diego Torres hiciera dos o tres goles en acciones de mano a mano.

Quedaban algo más de quince minutos y el duelo se complicaba aún más. Vílchez veía la segunda amarilla por una zancadilla por detrás después de una pérdida de balón en la salida del esférico. Con esa expulsión, el acoso del Palencia creció aún más y Diego Torres encontraba el gol que estaba buscando tras un servicio perfecto de Moré. No solo era el 2-0 sino que suponía que los palentinos se llevaran el golaveraje particular que tan importante puede ser al final de la campaña. Los últimos instantes fueron de sobra. Patadas, tanganas, florituras de los jugadores del Palencia y un Zamora desquiciado que estuvo a punto de recibir el tercero.

Al final, derrota para los rojiblancos que les sigue dejando líderes, pero con una distancia de tan solo cuatro puntos (tuvo doce no hace tanto) con un Palencia que es segundo y con el golaveraje a favor. Además, la Segoviana, pese a empatar, se pone a cinco puntos de la primera posición.

Fuente: http://www.zamora24horas.com/deportes/28-02-2016-golpe-de-realidad-en-palencia

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