El partido más corto del Deportivo

0 BURGOS PROMESAS 2000

Pana

Juan

Maestu (A)

Dani Burgos

Cristrian (A)

Viti

(53’ David)

Manza

(43’ Marti)

Óscar

Pekas

(53’ Apa)

Jesús

Varo

3 DEPORTIVO PALENCIA

Carmona

Abel

Levas

Charly

Héctor

Pelayo

Durántez

Chuchi

(59’ Bayón)

Arranz

Diego Torres

(45’ Alonso) (A)

Rodri

(75’ Moré)

arbitro

José María Palacios Aragonés, soriano. Asistido por Moreno Peña y Garrido Concha.

goles

0-1, 20 segundos: Disparo duro y seco desde fuera del área de Durántez que se cuela cerca del palo. 0-2, minuto 3: Rodri rompe el fuera de juego ante la adelantada defensa local, batiendo en su salida al portero Pana.             0-3, minuto 29: Jugada muy similar a la anterior, con los mismos protagonistas.

campo

Castañares. Terreno de juego pesado por las lluvias caídas en la capital del Cid y con la hierba un tanto alta. Presencia de seguidores palentinos en las gradas, principalmente de la peña Infierno Morado. Entre los especadores, el ex jugador del CFPalencia Mario y el ex técnico del Danisa Cristo Atlético Álvarez de los Mozos.

El Deportivo Palencia ganó el partido más corto que se recuerda en la entidad morada, tres minutos, los que necesitó para colocarse en el marcador con dos goles de renta que acabaron por definir un partido dominado del primer al último minuto por los de Sedano, derrotando de esta forma al verdugo de los equipos palentinos en esta temporada, un Burgos Promesas 2000 que en los siete enfrentamientos anteriores ante los nuestros había sumado seis triunfos y un empate.

Luis Lopez Araico;

El técnico palentino dispuso un once totalmente adecuado al rival y al terreno de juego, un tanto pesado. Sabedor del modo de jugar de los burgaleses con la defensa muy adelantada, casi en la divisoria, alineó en las bandas a dos flechas, Arranz y especialmente Rodri, que a base de velocidad superaban como un cuchillo a la mantequilla la zaga local. Un sistema de juego tan valiente como arriesgado y más cuando el centro del campo no presiona a los pasadores.

Veinte segundos tardó el Deportivo Palencia en adelantarse en el marcador gracias a un durísimo disparo desde fuera del área de Durántez. En pleno desconcierto local por el mazazo recibido, llegaba el contragolpe eléctrico culminado por Rodri dos minutos más tarde. El verdugo palentino se había ejecutado a sí mismo. El Deportivo era un equipo sólido y compacto, sin fisuras. Carmona apenas tenía que intervenir arropado por una defensa segura y contundente con Héctor, Abel, Héctor y Levas. El centro del campo, con un Pelayo que fue más 112 que nunca, robaba y creaba, arropado el ventabañense en el pivote por Durántez y un Chuchi en la media punta, cerca de su mejor nivel. Torres acompañaba a los extremos Arranz y Rodri.

Una y otra vez, la defensa adelantada local era superada y en cada posesión visitante se aproximaba el gol y así llegaba el tercero, antes de la media hora de juego, elaborado y cocinado de la misma forma y con los mismos protagonistas que el anterior. Y pudieron llegar todavía más redondeando el primer tiempo, pero el asistente de la banda no quiso que hubiese mucha más sangre en esta ejecución.

Diego Torres abandonaba el campo en el descanso por una contractura muscular, pero su relevo, Asier Alonso, completó uno de sus mejores partidos de morado. Más bien el mejor. Presionando sin parar la salida del balón, haciendo mucho daño con las prolongaciones de cabeza, cayendo a banda y superando por velocidad y fuerza a sus rivales. Un manual en 45 minutos del delantero moderno, aunque le faltase la guinda del gol que mereció y que pudo haber conseguido de haberle pasado Rodri en un dos contra el portero, acabando la jugada siendo salvada en la misma línea de gol.

Pudo aumentar la cuenta el cuadro deportivista en la segunda parte, sin tanta electricidad en sus acciones ofensivas como en la primera parte, al acusar el enorme despliegue físico realizado, pero sí con mucho peligro. Pana, el portero local, evitó una goleada considerable. Sedano metió más fortaleza en el centro del campo con la entrada de Bayón, para frenar el intento de reacción local y mantener la intensidad del equipo. Pese a no haber más goles en este segundo acto, hubo momentos enormes de los deportivistas, con presión, recuperación inmediata, aperturas en banda, toque de balón. Funcionaba el equipo como una acordeón.

En la recta final hubo cierta y hasta lógica relajación morada con el marcador ya decidido, teniendo su única opción en todo el partido el cuadro burgalés tras una acción a balón parado y el posterior remate al larguero.

A falta de cuatro jornadas, cuatro puntos le restan a los morados para clasificarse para el play-off (más bien tres, al tener claramente el average general ganado a La Bañeza), pero sigue luchando por la apetitosa segunda plaza. Ayer cumplieron sus Promesas (la de tomarse la revancha con el equipo burgalés). Sólo falta que ahora se cumplan desde la cúpula.

Fuente: http://www.diariopalentino.es/noticia/Z77BE13FD-C652-4AEE-02F776A424ED58E0/20160418/partido/mas/corto/deportivo