Segunda derrota consecutiva para el filial rojillo, que en la tarde de ayer en ENCE no logró superar a un CD Palencia que dominó en el marcador buena parte del partido y aunque se quedó con 10 casi toda la segunda parte supo aguantar y aprovechar al máximo sus escasas llegadas de peligro.
Todo lo contrario que la escuadra rojilla, que si bien llegaba con más mordiente y mejor fútbol, no tuvo fortuna de cara al gol y solo gracias a un penalti batió a los palentinos, que se llevaron el choque por un gol a dos.
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| Enrique Truchuelo |
Aunque el Mirandés tuvo una clarísima a los cinco del inicio, con un balón que Álvaro no logra rematar tras un fallo inesperado en la defensa rival, en el 11 los palentinos marcaron distancias, con un gol de Xavi Moré que nació de una contra rápida de su equipo.
Moré, solo en la banda derecha, aprovechó que Moussa estaba algo adelantado para batirle por arriba. Así fue como subió el primer tanto de los morados al marcador.
A pesar del gol fueron los rojillos los que más opciones atesoraron en los siguientes minutos, como una de Eric que controló perfectamente de cabeza un balón para lanzar un disparo bien enfilado a la escuadra, que sin embargo se encontró con un Carmona igualmente acertado.
En el 37, de nuevo Eric parecía tener en sus botas el empate, con otro buen disparo que de nuevo Carmona echaba fuera. Quizá fueron los mejores momentos de la escuadra rojilla, que encajó con cierta resignación el pitido del árbitro que anunciaba el fin de la primera parte.
De esta forma, al descanso se llegaba con la sensación de poder empatar, y el gol llegó, merced a un penalti claro a los 4 de la reanudación que Raúl transformó. Con la igualada, y con uno menos en el Palencia por expulsión de Héctor, autor del penalti, el Mirandés parecía poder crecerse, pero en el 64 de juego un córner botado por Chuchi llegaba hasta el segundo palo, donde Diego Torres ponía el 1-2 que resultó definitivo.
El gol fue un auténtico jarro de agua fría. A partir de ahí, los intentos rojillos se sucedieron pero sin el orden de la primera parte ni la calidad en los pases y controles.
El Club Deportivo Palencia Balompié se esforzó con diez jugadores sobre el campo en no dar una oportunidad a la escuadra rojilla. Sacrificio que obtuvo su éxito, ya que logró amarrar el resultado.
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