El mediapunta lidera al Deportivo Palencia en su goleada al Bembibre
Hace ya casi dos meses del final del Ramadán, mes de ayuno y culto para la comunidad musulmana. Por eso no hay ya motivos para tanto sacrificio en pleno septiembre, pero sí para la celebración e incluso la devoción –en términos futbolísticos–. Un joven vallisoletano de apenas 21 años hizo su aparición este domingo en el débil césped de la Nueva Balastera y obró no un milagro, pero sí un partido para enmarcar. Su nombre es Alejandro Rabadán García, su particular Meca es la Balastera y sus dos goles más su asistencia para el 2-0 de Xavi Moré fueron vitales para el abultado resultado que logró el Deportivo Palencia, nada menos que un 5-1 ante un Atlético Bembibre que ni pudo ni supo frenar la sangría de goles locales.
Desde la primera y larga posesión de los deportivistas se intuía que se sentían cómodos, con ganas de dar buen espectáculo a sus fieles –menos que en la cita contra el Villamuriel–, especialmente un Xavi Moré muy participativo que comenzó avisando con un centro que quedó lejos para Diego Torres en el minuto 9. A pesar de que Cueto también amenazó la portería de Carmona de lanzamiento de falta, el primer golpe lo dieron los palentinos de un saque de esquina botado por Chuchi, que empujó con el cuerpo Bayón, totalmente desmarcado para poner el 1-0. La travesía por el desierto para los bercianos no había hecho más que comenzar.
Ni tres minutos hicieron falta para ver otro tanto, y con él la aparición cuasidivina de Rabadán, que asistió desde el mediocampo a Xavi Moré. El deportivista, a la carrera, se plantó solo ante Ivanildo y coló el balón debajo de sus piernas para conseguir el segundo gol. El Deportivo Palencia estaba en racha, y el mediocampista pucelano debía aprovecharlo. En el minuto 21, Rabadán y Moré se repartieron el balón en varias paredes hasta que el primero se decidió a marcar el 3-0. Y mientras tanto, el Bembibre no encontraba la manera de reponerse, más rezándole a algún dios que imponiendo cambios válidos en su juego.
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| El deportivista Álex Rabadán se retira al vestuario tras sus dos goles, este domingo, en la Balastera. / Merche de la Fuente |
El 4-0 cayó en el minuto 43, también de las botas de Rabadán a disparo cruzado tras un pase de Diego Torres. El júbilo llegó a las gradas, aunque sin gritos de aleluya, para alcanzar el descanso.
La segunda parte no dio mucho de sí, y causó más bien el sopor de la grada, en la que estaba Iván Pelayo como jugador descartado tras haber entrado en la convocatoria. El gol del honor fue firmado por Cueto de falta directa en la media luna del área, mientras que Diego Torres puso el 5-1 definitivo en el tiempo de descuento. Con esta victoria, los palentinos suman seis puntos, y la afición local, una nueva referencia. ‘Salam aleikum’, y que la paz esté con el Deportivo.
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