2 DEPORTIVO
Carmona
Adrián (A)
Serrano
Hache
(Simón, 60’)
Héctor
Pelayo (A)
Xavi Moré (A)
Cabezudo
(60’ Durántez)
Morant
(Iván, 74’)
Diego Torres
Roberto Levas (A)
Adrián (A)
Serrano
Hache
(Simón, 60’)
Héctor
Pelayo (A)
Xavi Moré (A)
Cabezudo
(60’ Durántez)
Morant
(Iván, 74’)
Diego Torres
Roberto Levas (A)
2 TORDESILLAS
Farolo
Jony
Cristian (A)
Iván López
Romero
Álvaro
Adalia
(65’ Iván) (A)
Viti
Hamat
(87’ Andoni)
Josete
(Víctor, 93’)
Tiri
Jony
Cristian (A)
Iván López
Romero
Álvaro
Adalia
(65’ Iván) (A)
Viti
Hamat
(87’ Andoni)
Josete
(Víctor, 93’)
Tiri
arbitro
Laín Pérez, soriano. Auxiliado por López y Moreno. Pésima actuación, tanto suya como de uno de sus auxiliares, capaz de señalar un fuera de juego tras un saque de banda. Se le reclamó un penalti en el área visitante y se pidió falta en el segundo tanto vallisoletano. Sólo prolongó seis minutos, cuando prácticamente fueron los que se perdieron en la lesión de Adalia.
goles
0-1, minuto 34: Adalia se va en velocidad, se escora y marca entre las piernas de Carmona. 1-1, minuito 46 de la primera parte: Centro de Moré que no llega a rematar nadie y se cuela por el segundo palo. 1-2, minuto 52: Pelayo pierde ante Adalia (reclamó falta) se va de Hace y marca ante Carmona. 2-2, minuto 83: Héctor, aprovechándose del rechace del portero visitante.
público
Balastera. Buena entrada.
Laín Pérez, soriano. Auxiliado por López y Moreno. Pésima actuación, tanto suya como de uno de sus auxiliares, capaz de señalar un fuera de juego tras un saque de banda. Se le reclamó un penalti en el área visitante y se pidió falta en el segundo tanto vallisoletano. Sólo prolongó seis minutos, cuando prácticamente fueron los que se perdieron en la lesión de Adalia.
goles
0-1, minuto 34: Adalia se va en velocidad, se escora y marca entre las piernas de Carmona. 1-1, minuito 46 de la primera parte: Centro de Moré que no llega a rematar nadie y se cuela por el segundo palo. 1-2, minuto 52: Pelayo pierde ante Adalia (reclamó falta) se va de Hace y marca ante Carmona. 2-2, minuto 83: Héctor, aprovechándose del rechace del portero visitante.
público
Balastera. Buena entrada.
Cuarto partido consecutivo sin conocer la victoria, sólo tres puntos sobre doce posibles. De ser segundo, con aspiraciones de alcanzar el liderato, a ocupar la cuarta plaza (empatado a puntos con el Becerril, que le supera por golaverage) y a tres puntos del quinto, la Segoviana. Da la sensación que tras el encuentro de Aranda, donde con el empate perdía muchas opciones de liderar el Grupo VIII, el equipo morado se ha dejado ir.
Ayer cedía un empate ante un Tordesillas que tuvo la virtud de aprovecharse de los regalos de los palentinos. Cierto es que mereció más, pero también que jugó en muchas fases del partido confundido, jugando acelerado cuando tenía que dar pausa y con lentitud y horizontalidad cuando debía meter ritmo.
Tomé realizó hasta tres cambios en relación al equipo que perdió en Becerril. Hache entraba en la zaga por Félix, Cabezudo dejaba a Durántez en el banquillo y en la media punta entraba Morant por Javichi. El Tordesillas le cedió el balón a los morados, esperando atrás y buscando el contragolpe con balones largos aprovechando la velocidad de Adalia y Hamat. Parecía que el gol local era cuestión de tiempo, de ir madurando el partido. Incluso Serrano estrellaba un balón en el larguero. Sin embargo, en su segunda llegada, tras la inicial de Adalia, el cuadro vallisoletano se adelantaba en el marcador en una galopada del propio punta rojiblanco, colocando el balón por el palo que ocupaba Carmona.
El tanto lo acusó el Deportivo, que sólo en la banda derecha con Adrián y especialmente Moré hacía daño. El extremo vallisoletano lograba en la prolongación del primer tiempo el empate en un centro que al no encontrar rematador se acababa colando. Todo hacía indicar que era el camino de la remontada, porque la diferencia entre ambos equipos es más que notable.
Sin embargo, todo se volvió a torcer al poco de la reanudación. Pelayo perdió un balón en su propia zona de medios, pidió falta de Adalia que encaró a Hache y marcó en su perfil ante Carmona. Con independencia de si fue o no acción antirreglamentaria, no debió dejarse al goleador del Tordesillas llegar con tanta facilidad. Regalo o error arbitral, o ambas cosas, el Tordesillas volvió a ponerse por delante en el marcador.
Poco después, el propio Adalia abandonaba el campo lesionado. Mientras que era atendido (por cierto, por el médico y fisio del Deportivo) se fueron cinco minutos de partido, a los que se sumaron muchos más ante las constantes y reiteradas pérdidas de tiempo de los visitantes, en su afán por cortar el ritmo de los locales y con el consentimiento arbitral, que luego sólo descontó seis minutos. El trío arbitral ayudó a que la confusión, las prisas y la ansiedad fuese mayor en los locales, que si un fuera de juego tras saque de banda, que si un penalti reclamado y no pitado... En ese momento faltó pausa y cabeza fría.
Pese a todo, la sensación de agobio local era cada vez mayor. Tomé se la jugó con los cambios, formando con tres atrás, encerrando en su parcela a unTordesillas que estaba muerto físicamente y que pedía la hora. Una y otra vez se acumularon ocasiones claras de los morados, emergiendo la figura de Farolo. Sobró también precipitación en esos momentos decisivos. El problema fue que Torres, el que siempre define con claridad y calidad, estuvo muy vigilado y apenas le dieron opción al remate. Moré, que en la primera parte fue letal, tenía ahora a dos jugadores marcándole. Así que tocó tirar de heroica, acumulando muchos jugadores arriba, llevándose todas las segundas jugadas.
Héctor lograba el empate a falta de nueve minutos más el corto añadido del colegiado. Quedaba tiempo, pero entre las nuevas interrupciones y los cambios se quedó en nada, aunque en el último segundo salvase Farolo el 3-2.
El Deportivo se dejó llevar dos puntos, principalmente por errores propios. Debe recuperar cuanto antes su juego, su esencia. Los rivales y los colegiados le están perdiendo el respeto.
Ayer cedía un empate ante un Tordesillas que tuvo la virtud de aprovecharse de los regalos de los palentinos. Cierto es que mereció más, pero también que jugó en muchas fases del partido confundido, jugando acelerado cuando tenía que dar pausa y con lentitud y horizontalidad cuando debía meter ritmo.
Tomé realizó hasta tres cambios en relación al equipo que perdió en Becerril. Hache entraba en la zaga por Félix, Cabezudo dejaba a Durántez en el banquillo y en la media punta entraba Morant por Javichi. El Tordesillas le cedió el balón a los morados, esperando atrás y buscando el contragolpe con balones largos aprovechando la velocidad de Adalia y Hamat. Parecía que el gol local era cuestión de tiempo, de ir madurando el partido. Incluso Serrano estrellaba un balón en el larguero. Sin embargo, en su segunda llegada, tras la inicial de Adalia, el cuadro vallisoletano se adelantaba en el marcador en una galopada del propio punta rojiblanco, colocando el balón por el palo que ocupaba Carmona.
El tanto lo acusó el Deportivo, que sólo en la banda derecha con Adrián y especialmente Moré hacía daño. El extremo vallisoletano lograba en la prolongación del primer tiempo el empate en un centro que al no encontrar rematador se acababa colando. Todo hacía indicar que era el camino de la remontada, porque la diferencia entre ambos equipos es más que notable.
Sin embargo, todo se volvió a torcer al poco de la reanudación. Pelayo perdió un balón en su propia zona de medios, pidió falta de Adalia que encaró a Hache y marcó en su perfil ante Carmona. Con independencia de si fue o no acción antirreglamentaria, no debió dejarse al goleador del Tordesillas llegar con tanta facilidad. Regalo o error arbitral, o ambas cosas, el Tordesillas volvió a ponerse por delante en el marcador.
Poco después, el propio Adalia abandonaba el campo lesionado. Mientras que era atendido (por cierto, por el médico y fisio del Deportivo) se fueron cinco minutos de partido, a los que se sumaron muchos más ante las constantes y reiteradas pérdidas de tiempo de los visitantes, en su afán por cortar el ritmo de los locales y con el consentimiento arbitral, que luego sólo descontó seis minutos. El trío arbitral ayudó a que la confusión, las prisas y la ansiedad fuese mayor en los locales, que si un fuera de juego tras saque de banda, que si un penalti reclamado y no pitado... En ese momento faltó pausa y cabeza fría.
Pese a todo, la sensación de agobio local era cada vez mayor. Tomé se la jugó con los cambios, formando con tres atrás, encerrando en su parcela a unTordesillas que estaba muerto físicamente y que pedía la hora. Una y otra vez se acumularon ocasiones claras de los morados, emergiendo la figura de Farolo. Sobró también precipitación en esos momentos decisivos. El problema fue que Torres, el que siempre define con claridad y calidad, estuvo muy vigilado y apenas le dieron opción al remate. Moré, que en la primera parte fue letal, tenía ahora a dos jugadores marcándole. Así que tocó tirar de heroica, acumulando muchos jugadores arriba, llevándose todas las segundas jugadas.
Héctor lograba el empate a falta de nueve minutos más el corto añadido del colegiado. Quedaba tiempo, pero entre las nuevas interrupciones y los cambios se quedó en nada, aunque en el último segundo salvase Farolo el 3-2.
El Deportivo se dejó llevar dos puntos, principalmente por errores propios. Debe recuperar cuanto antes su juego, su esencia. Los rivales y los colegiados le están perdiendo el respeto.
TOMÉ: "ESTÁN PASANDO COSAS MUY RARAS EN TODOS LOS ASPECTOS"
Tomé, aunque pausado, se le veía contrariado por el empate cedido. «Nos jugábamos mucho, pero la toma de decisiones no fue buena y tampoco hemos tenido suerte con el colegiado. Ellos han llegado dos veces dos goles en dos regalos nuestros y nosotros no hemos sabido materializar las múltiples ocasiones que hemos tenido.No ha sido un partido para recordar».
Capítulo aparte mereció el colegiado. «A estas alturas de la liga, con lo que hay en juego, no es normal que nos pite un soriano. No puedo decir que hayamos perdido algún partido por los colegiados, no sé si hubo penalti o no, si hubo o no falta sobre Pelayo en el segundo gol, pero sí veo una predisposición en nuestra contra. Lo del fuera de juego tras saque de banda fue raro. Nos están pasando cosas muy raras en todos los aspectos. Estamos en una etapa en la que todo nos sale al revés. El partido de Almazán es importantísimo».
Capítulo aparte mereció el colegiado. «A estas alturas de la liga, con lo que hay en juego, no es normal que nos pite un soriano. No puedo decir que hayamos perdido algún partido por los colegiados, no sé si hubo penalti o no, si hubo o no falta sobre Pelayo en el segundo gol, pero sí veo una predisposición en nuestra contra. Lo del fuera de juego tras saque de banda fue raro. Nos están pasando cosas muy raras en todos los aspectos. Estamos en una etapa en la que todo nos sale al revés. El partido de Almazán es importantísimo».
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