El Deportivo Palencia empata sin goles ante un Numancia B que demostró poso en el campo pese a su juventud, en un partido en el que hubo alternancias pero poco juego y ocasiones
Lo dijo en la previa Juanjo Rodríguez. «El Numancia B es un filial atípico, tiene juventud y calidad pero también agresividad y experiencia con los refuerzos de este año», comentaba el técnico del Deportivo Palencia en relación al rival soriano. Y los de Juan Carlos Moreno demostraron este domingo que son dulces en su juego, pero no azucarillos que se disuelvan fácilmente. «Si no les quitamos el balón, sufriremos», apostillaba Juanjo, y como la pelota no fue de nadie y de los dos, al final el empate fue un resultado justo.
Javichi dispara a puerta. / MERCHE DE LA FUENTE |
No era tan trémula la carne del Numancia B. Jóvenes, pero en absoluto temblorosos ante los años y las heridas de césped de los Durántez, Serrano, Pelayo o Diego Torres. Tenía razón Juanjo Rodríguez, era un filial atípico el Numancia B, que no se amilanaba ni aunque le enseñaran los carnés de identidad en el Deportivo Palencia. Estaba por ver qué ocurría tras el recreo, si llegaban o no las collejas de los mayores ante tanta desfachatez pueril. Y lo que ocurrió fue que el Numancia B metió el miedo en el cuerpo al Deportivo Palencia en el minuto 49, en un disparo envenenado de Edipo, que había salido de refresco, que obligó a Carmona a estirarse más que un potro de tortura para tocar el balón lo justo para marcharse a córner. Vaya con Edipo, que no tiene complejos ni enamoramientos incestuosos más que con la portería contraria. Se notó su presencia en el ataque del Numancia B, mientras que en el Deportivo apenas había actividad adelante. Solo destellos de Diego Torres.
El Numancia B seguía a lo suyo, inclinando de nuevo la balanza a su favor en el control del juego y adivinándose cada vez más su peligro en las llegadas. El 0-1 parecía más cerca que el 1-0, con el Deportivo comenzando a achicar agua en su casco. Había amenaza de naufragio, con Edipo como iceberg negro. A los de Juanjo Rodríguez les hace falta un creador como el comer, máxime lastradas las bandas sin Xavi Moré y Conde. Con juego directo hacia Diego Torres puede sonar la flauta, pero fiarlo todo al carácter depredador del ‘nueve’ morado puede acabar fagocitando al equipo.
Salieron César Simón y Pablo como cambios ofensivos, pero no llegaba el Deportivo Palencia, aunque entrados los diez minutos finales metió más intensidad al partido. Edipo pudo marcar en el minuto 83 en una jugada en la que se pidió fuera de juego del atacante soriano y que salvó como pudo con los pies Carmona fuera del área. Madrigal, un minuto más tarde, pudo marcar en un balón que sacó de su cabeza el meta del Deportivo. Y Durántez tuvo la última en un remate de cabeza con el tiempo ya cumplido.
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