El Deportivo estrecha el cerco

• El equipo de Álvarez Tomé palía la falta de juego con contundencia arriba y divisa ya a la Arandina y al Numancia B

• La derrota de la Arandina en Miranda y el empate del Numancia B a domicilio ante el Salmantino animaban este domingo la previa del partido. La racha del Deportivo Palencia, con siete partidos sin perder, hacía el resto. Ganar se antojaba necesario, vital para creer de forma definitiva en el ‘play off’ de ascenso, para reavivar esa ilusión de pretemporada. Era un partido muy importante, todos lo son, pero ver de cerca ya la espalda de los dos primeros de la tabla da mucha moral, reconforta al perseguidor. A ello se aplicó el equipo de Miguel Ángel Álvarez Tomé ante la Cebrereña, a aprovechar la ocasión y acortar distancias con la Arandina y el Numancia B, ahora a tres y un punto, respectivamente. La racha se eleva ya a ocho partidos sin doblar la rodilla (con cuatro victorias consecutivas), resultadismo del bueno, sin reparar en el juego. Laudrup jugaba muy bien, pero Arbeloa tiene mejor currículum.
  
  En el primer cuarto de hora de partido, el Deportivo empujó hacia su área a la Cebrereña y abrió bien el campo para dificultar su defensa. Levas y Durántez probaron de cabeza, y el propio Levas dispuso de una clara ocasión en el minuto 13 de partido, cuando se plantó solo ante Ariel y falló en el mano a mano. Más bien acertó el portero, que dejó pálido al delantero, casi blanco nuclear (perdón por el chiste fácil), preguntándose cómo pudo abortar la ocasión el guardameta abulense.
  Digo en el primer cuarto de hora de encuentro, porque a partir de ahí se estiró la Cebrereña, se atrevió a desplegarse, a llegar a los dominios de Carmona. Mario, culminando de tacón una jugada trenzada por la derecha de la Cebrereña, avisaba de que había rival en el campo opuesto, y Súper hacía honor a su apellido con llegadas rápidas, casi con capa. Fútbol había poco, es cierto, pero el Deportivo Palencia juega ahora a otra cosa, al resultadismo. A no encajar y a marcar, aunque sea un único gol.

  

  El lateral del Deportivo Palencia Adrián, en una acción
   de ataque ante la Cebrereña. / MERCHE DE LA FUENTE

  Lo consiguió en el minuto 31, en la acción de más calidad hasta ese momento, un gran pase de Iván Cabezudo por encima de la defensa abulense que dejó solo a Ramón Morant ante un Ariel que esta vez no fue detergente, que no pudo limpiar el balón de la fotografía, alojándose este en la red tras el toque sutil por arriba del nuevo delantero morado.
  Se había conseguido lo más difícil, abrir el camino. Funcionaba la zapa de los legionarios de Tomé. Con 1-0, había que fortificar el castro, la portería de Carmona, y avanzar en testudo. Sentó muy bien el gol al Deportivo, quería más ante una aturdida Cebrereña. Adrián se proyectaba con peligro al ataque desde el lateral derecho y Levas se mostraba activo, dinámico en sus acciones, pero con ventaja mínima para el Deportivo Palencia se llegó al descanso. Si la Cebrereña quería sacar algo positivo de La Balastera, debía mejorar mucho.
  La capa de Súper siguió volando en la reanudación, solo que se enredaba en fueras de juego. Tomé, con voz de centurión, pedía tensión a su equipo, mientras los abulenses imprimían más revoluciones a sus acciones. Pelayo contenía en el centro del campo, cobraba más protagonismo, pero al Deportivo Palencia hace tiempo que las musas no le visitan a la hora de crear juego. No usa pincel, menos aún si le faltan jugadores como Xavi Moré o Conde. Durántez y Cabezudo agarran la brocha, y solo Diego Torres se atreve a trazar líneas. En la Cebrereña ni eso, si acaso utilizan calcos para copiar. Qué sopor de partido. A todo esto, habían pasado ya más de quince minutos de la segunda parte.
  Animó el cotarro en el minuto 20 el portero Ariel con una manchurrón imposible de eliminar, ni dejándose los nudillos frotando. En una contra del Deportivo, el balón le llegó por la derecha del ataque a Cabezudo, que avanzó hasta la línea de fondo y centró para que Ariel, en su salida lateral, se comiese literalmente el balón y dejase este franco para que Levas, solo, empujase a la red. La Cebrereña firmaba el armisticio con dos balazos en el pecho. A falta de lucidez velazquiana o goyesca, bricomanía de la buena para el Deportivo Palencia, que en el minuto 79 convertía el resultado en goleada con el doblete de Morant, tras un pase –este sí genial– de Diego Torres, que habilitó de tacón al reciente fichaje morado para que este marcara a placer. El postrero tanto del defensa Juanma para la Cebrereña, en un remate de cabeza al lanzamiento de un córner con el tiempo ya cumplido, no hacía sino dulcificar un tanto una derrota que la Cebrereña se ganó a pulso, tan timorato como anduvo.
  Que los árboles, eso sí, no impidan ver el bosque, que la contundencia del resultado no solape la falta de fútbol del Deportivo Palencia, aunque a estas alturas de competición liguera eso importe menos. Igual faltan pinceles, pero sí hay picos y palas atrás y martillos arriba, y si de apuntalar el ‘play off’ de ascenso se trata, hacen falta ferralla y clavos más que lienzos y caballetes.
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• http://www.elnortedecastilla.es/deportes/futbol/201503/01/deportivo-estrecha-cerco-20150301201622.html