lunes, 5 de enero de 2015

El Deportivo no pasa del empate en el debut de Tomé

  • El equipo palentino firma tablas por novena vez esta temporada, en un partido que mereció ganar ante el Burgos Promesas 2000


Año nuevo, entrenador nuevo, pero sin novedad en el marcador de La Balastera. Juanjo Rodríguez, quien vio el partido desde el túnel de vestuarios, era destituido durante las vacaciones navideñas y el técnico leonés Miguel Ángel Álvarez Tomé tomaba los mandos del Deportivo hace exactamente una semana.


El primer examen de Tomé, el partido de ayer ante el Burgos Promesas 2000, concluyó sin sobresaliente pero aprobando la primera prueba. El Deportivo empataba (2-2) un encuentro que se tornó loco en la segunda parte, con gol en propia puerta de Sancha y tanto anulado a Simón, pero que dominaron claramente en la primera mitad, perdonando goles hasta la extenuación. Si se quiere ver el vaso medio lleno hay que decir que los jugadores lo intentaron todo sobre el campo y tuvieron tanto actitud como aptitud. Verlo medio vacío sería señalar que no se puede seguir sumando de uno en uno si se quiere estar al final de la temporada en el ‘play off’.

La primera parte solo tuvo un dueño y ese fue el equipo local. Los primeros minutos fueron claramente de tanteo, con ambos equipos fríos tras el parón navideño, analizando al rival sin adelantar líneas ni mostrar las cartas. Pero el conjunto de Tomé comenzó a hacerse dueño del balón y de las ocasiones, con un Xavi Moré excepcional, que volvía locos a los rivales, igual daba si jugaba por banda derecha que por la izquierda. Sin Conde ni Javichi, el primero fuera del campo por lesión y el segundo por sanción, la velocidad llegaba de las botas del catalán acompañado por Diego Torres y Levas.
Tomé da instrucciones a Iván, que
se incorpora tras una larga lesión.
 / Merche de la Fuente
El pichichi no quería irse de vacío en el primer choque del año y buscó batir a Javi desde el principio. La jugada en la que se levantaron todos los aficionados palentinos de las butacas cantando el gol fue en el minuto 23 de partido, cuando Torres remata un certero disparo de cabeza que detiene el meta burgalés. No hubo variaciones desde este disparo hasta el final de la primera parte. Moré centraba y, normalmente, Torres buscaba el esférico sin descanso, pero siempre se estrellaba contra Javi. Tomé se desesperaba desde el banquillo local, viendo que las ocasiones se sucedían pero que ninguna de ellas subía al marcador.
El paso por los vestuarios no varió el guión de la primera parte, ya que los morados seguían teniendo la posesión del balón y dominando el encuentro a placer. Hasta que llegó la ocasión visitante y el gol de Casado, que ponía por delante al Burgos Promesas. Corría el minuto 53 y prácticamente no habían llegado a puerta en todo el choque. Tomé decidía poner toda la carne en el asador y apostaba por el ataque al sacar a César Simón por Serrano.
A pesar de que el gol visitante hizo daño a los locales, no bajaron los brazos y siguieron atacando, llegando nueve minutos más tarde el tanto del empate, obra de Pelayo. El capitán se aprovechó de un rechace y clavó el esférico en la escuadra rival. Cuando todo parecía estar más de cara para los palentinos, Sancha marcaba en propia puerta y adelantaba a los burgaleses. Hubo tiempo para la reacción con una diana de Levas en el minuto 79 y aún hubo tiempo para ganar pero todos los intentos terminaron fuera de la red rival. El resultado no fue justo en cuanto a juego pero el fútbol es así. Lo mejor del encuentro de ayer fue la vuelta de Iván, alejado durante meses del terreno de juego por una lesión en la rodilla.

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